Instalando Raspberry PI
Material requerido.
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Una Raspberry Pi 3, aunque valen la 2 y la 1 |
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Una micro SD de al menos 4Gb y preferiblemente de 8Gb, 16 Gb o 32 Gb. |
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Una fuente de alimentación externa tipo teléfono móvil con micro USB |
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Un cable HDMI |
El primer arranque
De acuerdo. Hemos descargado el NOOBS, formateado la tarjeta SD e instalado el sistema Raspbian en ella. Ya solo falta arrancar y ver que pasa.
Coloca la tarjeta en su bahía y conecta la fuente de alimentación. Si todo está en su sitio veras enseguida un monton de mensajes corriendo por la pantalla típicos del arranque de Linux.
En el momento de escribir esto, Raspbian arranca directamente sin necesidad de introducir contraseña y veras algo asi:
La mayor parte de la gente que conozco sigue creyendo que Linux es muy complicado y diferente, pero lo cierto es que si estas acostumbrado a Windows o Mac, enseguida te moverás con comodidad por el entorno gráfico.
La mayor diferencia es que los menús están en la barra superior y no en la inferior (Por dar la nota) pero si empiezas a pinchar por ahí, pronto te encontraras como en casa.
Seguro, cambiar de sistema es complicado (Recuerda lo que es pasar de Windows 7 a Windows 8, por ejemplo) pero nada que no te acostumbres en unos días. Juega un poco y acostúmbrate a él.
Pero te interesa saber una cosa: Linux es un sistema operativo con un nivel de seguridad fuerte y vas a necesitar conocer un usuario con derechos y su contraseña. El que viene por defecto es:
Usuario: pi Contraseña: raspberry
Pero mucho cuidado, ambas en minúsculas. Linux diferencia mayúsculas de minúsculas a diferencia de Windows y esta es la primera manía que tienes que recordar o vas a tener más de un disgusto.
Ese usuario, pi, que es el que entras por defecto tiene derechos restringidos y no puedes hacer todo lo que quieras con el, lo para evitar daños innecesarios (Especialmente de novicios inexpertos) y por eso la costumbre en Linux es crear usuarios sin demasiadas atribuciones inicialmente
Personalmente creo, que la experiencia aumenta con el número de equipos que uno rompe, y por tanto creo que se aprende mucho mas de equivocarse y estropear cosas y esto no es la excepción.
Además si rompes tu Linux ya instalaremos otro, no es como cuando hay 50 usuarios y un negocio detrás que no puede parar. Basta con que hagas de vez en cuando una copia de la tarjeta SD y te aseguraras contra catástrofes (Y si no espabila para la próxima)
Si usas una Orange Pi, el usuario por defecto es:
Usuario: root Contraseña: orangepi
Y además te pedirá que te identifiques con él al arrancar.
Las primeras operaciones
Bueno ya conseguimos arrancar y ahora…. ¿Por dónde empiezo?
Lo primero es configurar un poco el sistema, cosas como la WIFI, la resolución de la pantalla, el teclado en español y cositas así que nos hacen la vida un poco más agradable. Y para eso, la buena noticia es que Raspbian dispone de una utilidad de configuración inicial que nos ayuda con todo esto.
La mala noticia es que corre en el intérprete de comandos y no en modo gráfico. Tenemos que abrir el modo comandos de texto CLI (Command Line Interpreter)
Alto ahí. Nada de salir corriendo.
Mucha gente bregada en informática tiene un pánico inevitable a las líneas de comandos porque te obliga a memorizar comandos crípticos, y creen que hay que ser egiptólogo para ello, pero creedme es una tontería y enseguida os acostumbrareis (No hace tanto tiempo no había otro modo, jejeje)
Para abrir el intérprete de comandos tenéis un icono directo en la barra de programas:
Si lo pinchas se abrirá la ventana de comandos:
Puedes maximizarla si estas mas cómodo, o incluso cambiar el tipo o el tamaño de la letra, enredando con los menús, pero por ahora ignoraremos todo esto. Nos interesa entrar en la configuración inicial de nuestra Raspberry, y para ello los adeptos saben que hay que escribir un conjuro cabalístico:
raspi-config
Pero cuando lo intentes veras que el sistema se negara amablemente, diciendo que no tienes suficientes derechos para correr ese programa, pero también te dirá que debes ser root para hacerlo y te sugiere una orden alternativa:
Y esto necesita una pequeña aclaración. Ya hemos comentado que el usuario por defecto, pi, no tiene demasiados derechos para evitar que un uso atolondrado provoque daños al sistema, y la cuestión es que configurar el sistema se considera una operación de riesgo porque puedes provocar un lío (Como poner tu teclado en chino por ejemplo)
Por eso, necesitas derechos suficientes para ello y hay una manera sencilla de hacerlo sin cambiar de usuario que siempre es un asco: Invocar derechos de root (La máxima autoridad del sistema) mediante el comando sudo (SUperuser DO) precediendo al comando.
Al hacerlo, el sistema entiende que si conoces la contraseña adecuada tienes derecho a ello y lanzará la aplicación solicitada, después de pedirte la contraseña de administración. Si escribes en el teclado:
sudo raspi-config
Raspbian Linux no te va a pedir la contraseña en este caso, pero sí que lo hará en multitud de otros casos y sobre todo de otros sabores de Linux.
Se abrirá una ventana como esta:
La primera opción: Expand file system, conviene que lo hagas la primera vez que corras este programa de instalación, pero ten en cuenta que una vez hecho no podrás repetirlo. No es grave simplemente es una operación única. Hazlo y servirá.
La segunda opción te permite cambiar la contraseña del usuario pi. Recuerda que Linux es muy estricto con las cuestiones de seguridad y te recomienda cambiar la contraseña de usuario para que no mantengas la que viene por defecto. Tu hermanita podría usarla para hacerte la vida imposible cuando se mosquee.
Si eliges esta opción, entraras en el modo comando y te pedirá que escribas un par de veces la nueva contraseña.
La opción 3, te permite elegir varias opciones de arranque del sistema:
Si eliges la primera opción: Consola (NO te lo recomiendo, si eres novato) Linux arrancara al modo de comandos sin entrar en el modo gráfico, por lo que solo es recomendable para usuarios muy bregados o servidores y en ningún caso para alguien que está leyendo esto.
Las opciones 3 y 4 te llevan al modo gráfico de modo que te pida o no la contraseña de inicio, por lo que te conviene elegir la 4 en estos momentos y es el modo por defecto en el que has arrancado (Pero si quieres fastidiar a tu hermanita, puedes hacer que pida contraseña al arrancar al modo gráfico, y evitarás que entre si no se la das)
La opción 4, sirve para que no arranques hasta que no tengas conexión a internet, no es recomendable, ya que si por cualquier problema falla la conexión no podrás arrancar, así que yo dejaría esto como está.
La opción 6 sí que es más importante porque seguramente ya te habrás percatado de que tu leal teclado en hispánico no responde como debiera a las teclas y los caracteres especiales están trastocados, porque por defecto se selecciona un teclado UK y con bastante seguridad no es el tuyo.
Necesitamos configurar el teclado español. Cuando lo elijas, verás algo como esto:
Empecemos cambiando el locale, que más o menos indica tu país y establece las condiciones básicas de idioma y teclado. Es conveniente que elijas las opciones de UTF-8 con las características propias del país en el que te encuentres.
En mi caso voy a elegir UTF-8 de eu-es, o sea Europa España, pero naturalmente si tu teclado es diferente, o estás en otro país, conviene que elijas lo que mejor se adapte.
Usa tabulador para saltar a OK, cuando hayas elegido y saldrá una nueva consulta:
Cuando pulse OK + intro veras que realiza una serie de operaciones para seleccionar tus opciones y al final te devuélvela al menú inicial.
Vuelve a seleccionar la opción 5 que hay más cosas a hacer y selecciona TimeZone:
Hay que fijar tu zona horaria, y es diferente en España o México, pero incluso dentro de España no es la misma en Bilbao que en Canarias (Y me imagino que México con su tamaño tendrá varias zonas horarias). Os voy a mostrar mis opciones en España, pero naturalmente cada uno necesitáis configurar vuestra zona y país:
De nuevo lanzará la configuración y os devolverá al menú principal ¿Creéis que ya terminamos con la opción 5? Pues no, aún hay más. Volved a pinchar la opción 5, que vamos a configurar la distribución del teclado (Pues sí, aun no lo hemos hecho aunque penséis lo contrario)
Elije el mejor te convenga y listo. Ahora cuando salgáis veréis que ya tenéis Ñs e interrogaciones ¿? (No me creas pruébalo)
Aun hay que volver a la opción 5 para seleccionar el área WIFI.
Ahora sí que hemos acabado con la opción 5 y ya deberíamos tener el teclado configurado y la zona horaria. Podemos seguir avanzando.
La opción 6 autoriza el uso de la cámara en la Raspberry. Podéis activarla si disponéis de ella aunque por ahora no vayamos a usarla. Pero en general no lo activéis si no disponéis de una. Cuando lleguemos a las cámaras ya volveremos aquí a activarlas pero entre tanto no es necesario.
Nunca he usado la opción 7 que es conectar con Rastrack, un servicio de información acerca de la Raspberry y que podéis activar o no según vuestro gusto (En perfecto Inglés, claro)
La opción 8 es mucho más del gusto de los que nos gusta enredar: Overclock.
Sirve para variar la velocidad de reloj de vuestra Raspi, o sea para acelerarla. Si disponéis de una Raspberry PI 1 o 2 podréis modificar la velocidad, pero no así la Raspi 3 que no permite el overclock.
Vamos con la última opción útil del menú inicial:
A1 Overscan: La opción de Overscan resulta útil si por cualquier razón la imagen que muestra tu monitor, es menor que el tamaño de la pantalla que usas o bien si no cabe en ella.
Si este es tu problema puedes probar esta opción para ajustar la imagen al marco real del monitor.
A2 Hostname: Te permite cambiar el nombre que mostrara tu equipo en la red.
A4 SSH: Permite activar o desactiva el control remoto por línea de comandos. Por defecto viene activada y te recomiendo que lo mantengas así, porque lo vamos a usar en un futuro próximo para conectarnos en remoto y hablaremos mas en detalle de ello.
Las opciones A5, A6 y A7 activan el soporte del sistema para los buses SPI, I2C y Serial respectivamente. Antes o después vamos a usarlos en algún montaje así que estaría bien que los actives ahora.
A8 Audio: Selecciona la salida de audio a través del HDMI o del Jack de audio. Por defecto viene en auto (Y es buena idea dejarlo así si no lo tienes claro, de modo que nuestra Raspi elija lo que detecte:
No hemos visto todas las opciones, pero tampoco tiene mucho sentido liarnos ahora mismo con ello. La idea era simplemente asegurarnos de configurar razonablemente nuestra Raspberry para poder seguir haciendo pruebas con ella.
Y ya solo nos falta un pequeño detalle para configurar nuestra RPI: La Conexión a Internet. Pero eso queridos amigos, será el tema de la próxima sesión, que esta ya se ha extendido en exceso.
Resumen de la sesión