Formación en tecnología y robótica I
Los clientes habituales de nuestra pequeña tienda (Que es quien paga los gastos de esta humilde casa) son tanto los Makers de Internet como los centros educativos de diferentes niveles, como primaria, Institutos de educación secundaria, bachiller y formación profesional (Y nos enorgullece incluir también mas de una Universidad de ciencias)
Entendemos bien a los Makers (Porque somos los mas Freakys) pero no tanto a los profesores de tecnología y responsables de colegios, por lo que hemos aprovechado que últimamente nos invitan a hablar frecuentemente en actos varios, como reuniones de profesores de tecnología, y asociaciones de padres para hacer contacto con estos formadores y tratar de ver sus intereses e inquietudes. Es decir de comprenderles y comprender sus inquietudes.
Como nosotros no podemos dejar de subirnos a una tarima a hablar de Arduinos, Raspberrys e impresoras 3D, a la mínima ocasión que tengamos, últimamente hemos tenido ocasión de hablar con muchos profesores y visitar muchos centros de formación, y más importante aún, de recibir muchas preguntas como expertos que somos (Lo dicen ellos, no nosotros)
Creo que esto nos ido dando una perspectiva única sobre los problemas que afrontan los centros y confío que también alguna idea de cómo ayudar resolverlos. Por eso, tras esos meses de toma de contacto nos ha parecido oportuno presentaros algunas reflexiones sobre estas cuestiones que nos hemos encontrado repetidamente y sobre las que confiamos poder aportar alguna luz.
En primer lugar, ya ningún profesor ni centro duda de que hay que impartir nociones de programación y robótica en las clases de tecnología, y hay mucho interés además por la conexión que esto tiene con las STEM, tan de moda hoy en día (Science, Technology, Engineering, Mathematics) y en este ambiente nuestros queridos Arduinos brillan, por su bajo costo, sencillez y posibilidades de expansión.
Pero el problema es que los centros educativos carecen de directrices claras en relación con los temarios a impartir, lo que provoca desconcierto, y además suelen ser conscientes de que el profesorado no está adecuadamente formado en la materia, lo que genera una inquietud dolorosa.
Ciertamente hay centros muy avanzados que han sabido encarrilar por libre esta cuestión, pero el problema es que no hay guías de conjunto y que además lo centros prefieren más un itinerario definido para varios años, de formación de sus alumnos más que cursos de tecnología improvisados sobre la marcha.
Si resolver el problema de la tecnología en un curso es complicado, diseñar un itinerario que cubra, digamos desde los 12 hasta los 18 años, está fuera del alcance de la mayoría de los centros por falta de expertos, y si lo juntamos con el problema de que cualquier itinerario de formación a lo largo de varios años necesita también incorporar a los alumnos de los últimos cursos, nos vamos a encontrar con un problema que prácticamente está paralizando la adopción de medidas en muchos centros, porque simple y llanamente no saben cómo avanzar.
Para empezar queremos empezar diciendo que somos firmes defensores de enseñar programación en la educación obligatorio por mil motivos que hemos apuntado en algún comentario previo, pero especialmente porque va a ser difícil entender el mundo que viene sin conceptos de programación, y además porque este es uno de los puntos que más se atascan en algunos centros: ¿Programación, de acuerdo… pero qué? (Nos lo preguntan mucho)
Creemos que conviene abordar la cuestión por edades: Por debajo y por encima de 14 -15 años.
Por debajo de esta línea de edad, prima aprender a programar jugando y definitivamente con un sistema de bloques: Scratch, Scratch for Arduino S4A, App inventor y similares y hasta Mblock.
Aunque a cualquiera ajeno al tema la angustia de elegir entre tanta opción diferente, le hará perder noches de sueño, la realidad es que no son muy diferentes y que los conceptos subyacentes son muy similares.
Todos estos lenguajes están basados en una lógica de bloques de colores que encajan o no entre sí de modo que se va completando una secuencia de operaciones clara, que representa el programa que cargaremos en el sistema de ejemplo.
Cuál de los diferentes lenguajes se elija depende mucho del gusto del profesor y de los objetivos del centro, pero la razón básica de estos lenguajes es enseñar al alumno a pensar en los conceptos de programas secuenciales que a algunos alumnos les cuesta tanto aprender más adelante. Y es eso se consigue con cualquiera de ellos.
Parece que hay un acuerdo de empezar por Scratch que puede correr en un PC cualquiera, a partir de unos 10 años (Antes no se recomienda nada que no sea Makey Makey) e ir poco a poco incorporando conceptos como la programación de móviles Android con App Inventor e ir después a Arduino con S4A (Scratch for Arduino) porque es una manera muy sencilla de iniciarse no solo ya con la programación, sino también con la relación de los programas y el mundo físico: La madre de toda la tecnología actual.
S4A acerca a los estudiantes juveniles a la programación, la electrónica y los sensores en diferentes grados de complejidad y les deja muy cerca después de seguir con robótica: Motores, comunicaciones, sensores…etc
Cuando vayamos acercandonos al final de la educación básica, la robótica con Mblock se ajusta magníficamente a todos estos conceptos y nos permitirán fijar ideas básicas de múltiples conceptos de un modo natural y sin grandes traumas en los estudiantes… y encima van a disfrutar (Sé que parece increíble, pero hacedme caso. Los chavales mejoran mucho con cacharritos que se mueven).
Mblock es ideal para todos los temas de robótica y es el paso siguiente a Scratch (Aunque también hay otros)
Es un buen momento para destacar que para aquellos cursos que ya van acercándose a la línea de salida se puede obviar algunos de todos estos pasos y saltar directamente a cosas como S4A y robótica, pero no es demasiado aconsejable, en mi opinión, saltar directamente a la robótica a sangre fría para evitar sustos. Es preferible tener una clase de aclimatación con un Scratch y luego pasar a Mblock
Una cuestión clave en todo esto es que parece haber un consenso general por ahí de no iniciar en C++ con Arduino a los chavales antes de los 14-15 años. La programación simbólica mediante frases propia de los lenguajes de alto nivel, no parece encajar con el desarrollo promedio de las personas de esta edad.
En la próxima sesión hablaremos de cómo empezar con Arduino y C++ y también de donde puede encajar la Raspberry y Python en todo este itinerario que parece surgir de aquí.
Un saludo desde Prometec y hasta la próxima.