El Furibee Nebula 230 es un dron de carreras listo para volar que ponemos hoy a la venta en nuestra tienda virtual de drones.

Posiblemente más de uno se pregunte como es posible que después de insistir tanto en que lo mejor es montar uno su propio dron acabemos vendiendo en nuestra web un dron listo para volar (RTF o Ready To Fly es como suelen ser llamados).

El motivo es doble: la primera razón es que hemos conseguido unas pocas unidades a un precio insuperable, lo que nos permite ofrecerlos en nuestra tienda a un  precio que da risa, eso sí, las unidades son contadas así que supongo que esto no va  a a durar mucho.

La segunda razón me la dio el otro día un amigo en una conversación. Su argumento se podría resumir en «es muy distinto cambiarle el radiador a un coche que construir un coche desde cero». Es decir, a mi amigo (que le encantan los drones) le parece que empezar a montar un dron desde la nada y hacer que vuele viene a ser algo así como escalar el Everest, prácticamente imposible. Sin embargo, la idea de reparar uno al que ha visto funcionar y sabe que vuela no le parece tan descabellada. Después de todo, tiene un equipo de soldar en casa y sabe (porque yo se lo he dicho) que incluso el periférico más complejo como puede ser un receptor de GPS finalmente no lleva más que cuatro puñeteros cables, así que reemplazarlo tampoco puede ser para tanto, verdad?

Así pues, la decisión está tomada: si encontramos kits ya ensamblados a buen precio, los adquiriremos para ofertarlos en nuestra tienda. El límite que nos ponemos es que deben tratarse de kits RTF realizados con componentes estándar que sean fácilmente sustituibles por otros similares que se puedan encontrar con sencillez. Todo debe ser open source, normal y fácil. Deben ser drones con componentes que podrías haber montado tú.[/box]

En este enlace puedes encontrar en nuestra tienda el Furibee Nebula 230.

El Furibee Nebula 230 es un dron de carreras con las siguientes especificaciones:

• Base: 230 mm
• Material del chasis: Material compuesto de fibra de carbono ultraligero
• Controlador de vuelo: OmnibusF4 con OSD
• Motores: 2205 – 2600KV
• ESCs: BLHeli-S 25A
• Hélices: 5042 x 3
• Cámara FPV: 700 TVL CMOS – lente de 2.8 mm
• VTX: 5.8 GHz 40 Canales-  25 / 300 mW
• Batería: LiPo 4S (no incluida)

El chasis, fabricado en fibra de carbono con los brazos de material compuesto, es un Stretch X, (puedes aprender más en éste enlace: chasis de cuadracópteros), es decir un chasis en X con una distancia entre los rotores mayor en el eje longitudinal que en el transversal (aprox. 145 x 165 mm). Es decir, sale una diagonal de unos 220 mm. El motivo por el que este modelo se llama Nebula 230 en lugar de Nebula 220 es algo que probablemente sólo esté al alcance de la lógica del pueblo creador del cerdo agridulce y de la gran muralla.

La versión que traemos a la tienda de Prometec es la «plug & play», es decir, no hay más que conectar un receptor de radio al FC, enlazarlo con el transmisor y el aparato ya está listo para volar. La otra versión disponible «bind and fly», venía con un receptor de radio no demasiado bueno pero cobrado como si lo fuese, y por ello hemos pensado que no era tan interesante.

Siempre con la idea de facilitaros el trabajo, adjunto un vínculo a la hoja de especificaciones del controlador de vuelo para que sepáis donde conectar el receptor

He hecho una recopilación de los videos de Youtube que he visto con todas las críticas al pájaro, y hay de todo, incluso alguien tan obsesionado con que la máquina es de color púrpura que acaba estropeando la cámara al cambiar la lente y al final se ve todo púrpura (puro karma, supongo), pero en lo que todas las críticas coinciden es que la máquina vuela muy bien y también en que hay cosas mejorables, como las estúpidas tuercas para fijar las hélices. Por qué no han usado tuercas autoblocantes como (casi) todo el mundo?

Haciendo un resumen corto (para beneficio de todos aquellos que no os manejáis en el idioma de Shakespeare), todos alaban la velocidad, agilidad y respuesta, y en general, el vuelo del aparato. Dos de los Youtubers realizan la prueba del «punch test» y los dos alucinan de cómo el dron sale disparado hacia el cielo. Las críticas de los vídeos se centran sobre todo en la lente de la cámara, de 2.8 mm, que para estos corredores de carreras expertos, les parece que proporciona un campo de visión demasiado estrecho, y la verdad es que viendo la velocidad a la que uno de ellos pasa las puertas con el dron, no me extraña su crítica, pero yo todavía estoy a años de volar a ese nivel, si es que alguna vez lo consigo, así que seguramente me manejaría bien con esa lente. En cualquier caso, si tenéis curiosidad de lo que cuesta reemplazar la lente de una cámara FPV, os dejo aquí este enlace.