NORMATIVA SOBRE DRONES EN ESPAÑA

Se conoce como un UAV (Unmanned Aircraft Vehicle) a un vehículo aéreo (de cualquier tamaño) no tripulado.

Las aplicaciones de esta tecnología, tanto militares como civiles se están desarrollando a velocidad de vértigo. Cada vez se les encuentra más utilidades a los drones equipados con una cámara como la inspección de lineas de alta tensión, la vigilancia contra incendios forestales, la topografía, controles de la calidad del aire, etc. , además de los usos puramente recreativos, es por ello que se ha hecho necesaria la implementación de una legislación específica concerniente a los drones.

Existe por tanto una una normativa de drones que hay que cumplir, que en algunos aspectos no es demasiado específica. Cuando se adquiere un dron, es importante saber que se puede hacer con él, donde se puede volar y cuando se puede estar incumpliendo la ley al hacerlo.

Vamos a resumir la legislación vigente de la forma más simple, para que aquel que simplemente se quiera comprar un juguete, no se acabe metiendo en problemas de la forma más tonta.

Hay que ser consciente de que cualquier dron, incluyendo el dron de juguete más barato que puedas encontrar, no sólo es un juguete, sino que se considera una aeronave, y por ello está sujeto a la normativa para drones.

Sin embargo, el uso de un drones como hobby, o para vuelo recreativo, no necesita la habilitación de AESA, pero se deben cumplir unas normas de seguridad que pasamos a resumir.

Esta legislación es válida únicamente en España. Cada país tiene su propia normativa

NORMATIVA SOBRE DRONES EN ESPAÑA

No se puede perder el dron de vista, es decir, no puede estar a una distancia que no nos permita verlo, ni detrás de obstáculos que no nos permitan saber exactamente donde se encuentra el dron.
No se puede superar los 120m de altura. Los drones de juguete no suelen tener tanto alcance, pero es posible adquirir equipo muy potente.
No es necesaria la posesión de un título de piloto, pero sí es necesario saber volar el dron con seguridad.
En España sólo se puede volar drones en zonas adecuadas para ello. La ley en este punto no es demasiado específica. Es de sentido común que las zonas adecuadas para volar drones son los lugares normales de vuelo de aeromodelismo, es decir: zonas despobladas, fincas y prados que estén alejados de la ciudad, etc. El mayor peligro de un dron es que le caiga a alguien encima causándole lesiones o incluso la muerte.
El responsable de cualquier daño causado por un dron es aquel que lo maneja.
No se puede volar drones en zonas urbanas.
No se puede volar el dron sobre aglomeraciones de personas, o en lugares donde haya grupos de personas: conciertos, manifestaciones, playas, parques, etc.
No está permitido volar un dron de noche. El primer punto decía que no se puede perder el dron de vista. Lo repetimos de nuevo. No se puede perder el dron de vista, y por ello está prohibido volar de noche, aunque el dron tenga luces.
No se pueden volar drones en lugares próximos a aeropuertos ni en otras zonas donde haya otras aeronaves que vuelen a poca altura, incluyendo aeródromos, helipuertos o zonas de parapente o paracaidismo.
No se puede poner en peligro a terceros. Siempre que volemos un dron debemos estar pendientes de donde lo estamos volando y si hay personas cerca. Por este motivo, y aunque la normativa no lo menciona expresamente, es necesario volar con un acompañante observador cuando volemos en FPV.
La ley prevé multas de hasta 225.000 €, por lo que recomendamos el sentido común y volar nuestros drones donde en caso de que se caigan no puedan causar ningún daño a nada ni a nadie.
No está permitido usar el dron para fines comerciales o profesionales sin una licencia (entre 350€ y 1600€ más unas 60 horas lectivas), esta licencia es necesaria para hacer fotografía aérea comercial, inspección de lineas de alta tensión, trabajos de topografía, etc. Para obtener la licencia es necesario ser mayor de edad y acudir a un centro especializado con un certificado médico y realizar un curso oficial para obtener el documento que nos acredita para realizar la tarea determinada. Es decir, que si quieres utilizar tu dron para sacar unas fotos de la boda de tu prima no hay ningún problema, pero si tu prima es la Pantoja y quieres vender esas fotos, entonces necesitas una licencia para volar el mismo dron. Así es la ley…